lunes, 19 de abril de 2010

Los retos del mañana

Hoy es un día muy especial para mí. Es mi cumpleaños. Además, voy a ser mamá. Quizás porque se han juntado estas dos circunstancias me he pasado el día pensando en mi niñez y juventud, recordando anécdotas y momentos especiales compartidos.

Y me gustaría que mi hija fuera tan feliz como yo. Pero no os voy a engañar. Hay momentos, como cuando leo las noticias en las que las personas tienen que hacer pública su opción sexual, o veo la falta de respeto a los derechos humanos fundamentales, en que pienso que tendrá que enfrentarse a un mundo lleno de dificultades. Y yo me pregunto, ¿por qué no respetamos la diversidad?

Cuando las personas acusamos como hacemos con el tema de la homosexualidad, por ejemplo, lo hacemos por varios motivos:

  • Nos asusta lo desconocido
  • No nos permitimos aquello que el otro sí: su libertad sexual (por libertad entiendo la capacidad por vivir su tendencia sexual con tranquilidad y normalidad).
  • Algo en nuestra sexualidad puede no estar yendo del todo bien.

¿Qué nos asusta tanto? Ante el miedo a lo desconocido, lo único que podemos hacer para superarlo es conocerlo, acercarnos a esa realidad, hablar con la gente que la vive, entenderla…

¿Qué no nos permitimos? La sociedad marca claramente el camino, y salirse del mismo tiene un precio. Hay quienes prefieren no pagar ese precio, aunque siempre pagarán el de la represión propia o el del sufrimiento de no ser libre.

No tenemos derecho a decidir cómo las demás personas han de vivir sus vidas. Bastante tenemos cada uno/a con las nuestras. Nos hemos dejado llevar y nos hemos dado el permiso para entrar en terrenos que no nos corresponden, y muchas veces, cuando sí nos corresponde, no tenemos el valor suficiente como para hacer algo al respecto. Hagámonos responsables de nuestras vidas y no tanto de las del resto. De esta forma, tanto nuestro futuro individual como colectivo será mucho más prometedor.

Laura

3 comentarios:

Ross dijo...

Hola Laura, en primer lugar, darte la enhorabuena por tu estado de buenaperanza y felicitarte por tu cumple, un día grande.

Es cierto que debemos de mirar más por nosotros, pero yo pregunto, si no fuera por la ayuda que nos ofrecen en un momento dado los demás, que sería de nosotros. A veces en la vida, tus miedos, están encerrados con muchos cerrojos, pero como todo, llega el momento de abrirlo, sacarlo fuera, ser libre..., ser tú.
Esas gentes que están ahí, nosotros que estamos aquí, serbimos en un momento dado de nuestra vida, para ayudar o ser ayudados, tenemos esa llave. Te la puede ofrecer, un compañero de trabajo, un familiar, un desconocido, un pasajero, cualquiera puede tenerla. Hay que abrir más. Sii, nos tenemos que mirar más a nosotros mismos, pero a veces, mirar a los demas, es mirarse por dentro.

Besos Laura, mucha luz para tí y para tu futura hija.

Laura Rosales. Psicóloga y Experta en Terapia Familiar dijo...

Muchas gracias por tus buenos deseos Ross!! estoy viviendo una etapa de mi vida preciosa!!
me encanta compartirla con gente como tú!

En cuanto a lo que escribes, sin duda tienes razón en cuanto a que el otro/a me sirve de espejo. En eso estoy absolutamente de acuerdo. Sin embargo, en el post hablaba de cuando nos adentramos en lo que forma parte de lo privado, de lo propio, y juzgamos sin compasión a las personas por el hecho de no compartir o entender su forma de vida. Si algo he aprendido es que el juicio no ayuda, solo distancia a las personas. Y muchas veces el juicio denota otras carencias internas de quien lo emite...

Muchas gracias por tu aportación, me encanta tenerte conmigo!!!

Hasta pronto!!!

Luz del Alma dijo...

Feliz cumple!!! 6 días despues...
Felicitaciones por la nueva vida que llevas en tí!
Acuerdo con vos, tambien con Ross, cuando logramos mirar para adentro, conocernos, aceptarnos, a veces resulta mas facil luego salir y ser espejo, haciendonos cargo de lo que reflejamos y recibimos como respuesta.
Abrazo de luz muy fuerte, Mirta